Los primeros meses
Seis meses de iniciar mi aventura como profesional autónoma, ya puedo sacar varias conclusiones, y las comparto con vosotras por si os sirven de ayuda:
Estoy viva (como emprendedora). Algo que sin duda tengo que celebrar teniendo en cuenta que no todo es sencillo cuando comienzas tu negocio, porque ser autónoma es emprender un negocio.
El tiempo es importante. No se trata solo de tener clientes, sino de saber asignar bien los tiempos a los proyectos, ajustar bien los presupuestos y dejarlo todo claro. En esto necesito mejorar, pero nadie nace aprendido y vamos tomando nota poco a poco con ayuda de amigos y buenos consejeros.
Invierte en tecnología. Simplificarás los procesos, evitarás tiempos muertos innecesarios y disfrutarás más de tu trabajo.
Cuidado con la mensajería móvil. A mí me ha jugado malas pasadas en la relación con mis clientes, la verdad es que más a menudo de lo que pensamos hay que levantar el teléfono o conseguir una reunión presencial.
Tu trabajo es tu vida. No, no es solo un medio para vivir, son horas de tu vida que, siempre que sea posible, debes dedicar a lo que te gusta o a aquello que puedas hacer bien. Y sí, descansar forma parte de tu trabajo.
Son cosas obvias, pero no por ello dejan de ser relevantes. Al menos para mí. Es hermoso volver a nacer y crear algo nuevo. Ahora, toca verlo crecer y dar frutos.
Seguimos.